domingo, 10 de julio de 2011

pues aquí seguimos

en estos días de pseudo-reclusión involuntaria me ha dado tiempo a darme cuenta de muchas cosas, algunas ya las sabía, otras las he confirmado y otras las he descubierto durante este mes y pico que estoy de baja.

no me gustaban los espacios cerrados, no me gustaba tener la cabeza debajo del agua y he descubierto que en una maquina de resonancia magnética entro en estado de pánico total, incluso los dos días posteriores a la prueba soñé con la máquina, ahora mis miedos (o fobias o como queráis llamarlo) se han acrecentado, veo un anuncio de teléfonos donde meten a gente en unas bolas gigantes de plástico y me pongo malísima....ni me imagino lo que podría ser de mi en un secador de peluquería de esos antiguos tipo casco...

soy una vaga, vale que estoy chunga y que la parte superior izquierda de mi cuerpo tiene pupita, pero no es excusa para otras cosas, coño, que me queda otra mano y dos piernas, pues no las uso, no señor, así que he ratificado la premisa de que soy una vaga de narices, la mas vaga que he conocido, un horror...

tengo paciencia cero patatero, eso ya lo sabia, simplemente lo he confirmado

me gusta leer, me encanta leer, ahora que he tenido tiempo y oportunidad de comprar otra vez libros lo he confirmado al 100%

soy una zampabollos, esta claro, mientras me movía un poco (aunque solo fuera para ir y volver del trabajo), ahora que he descubierto que soy una vaga ya ni me muevo, consecuencias: como lo mismo, me muevo -1 y me he puesto como una albondiguilla, redondita, redondita y lo que es peor, lo sé y como que me da igual (como soy una vaga)

quiero a mis hijos, bueno eso se sobreentiende, pero si unes mi poca paciencia con mi vagueria pues muchas veces me irritaban hasta lo infinito, pero estos días he pasado tiempo con ellos, sin la presión de haber ido y vuelto de trabajar y sin el cansancio habitual que me atacaba día tras día, los quiero mucho con sus defectos y sus virtudes, con sus rabietas y sus diferentes formas de ser, si, confieso, quiero a mis hijos más que mi vida

soy una maniática, tengo manías absurdas de me ponen de los nervios, eso ya lo sabía, ahora queda confirmado (ya hablare de esas manías)

sigo en casa, llevo más de un mes, ahora todos los días voy a rehabilitación lo que me obliga por lo menos a salir de casa y moverme un poco, espero poco a poco volver a mi actividad normal y volver a ser persona no solo un complemento del sofá

salud!

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